Pensar la comida: La gula, lo animal, el colapso
Sostiene Michel Foucault que la forma más eficiente del ejercicio del poder es a través de la normalización. Esto es hacer pasar como práctica normal aquellos intereses convenientes solo a una parte.
Normalizar implica construir un sentido común que nos involucra en nuestras acciones más cotidianas e inmediatas como estudiar, trabajar, amar, y sobre todo, comer.
Creemos que comer es un hecho natural, pero lo que nos metemos por la boca supone previamente un dispositivo de significados elaborados con una intención.
Y hoy no comemos, nos comen.
Por eso, cuestionar el paradigma dominante del sistema alimentario es generar una resistencia contra las formas de normalización hegemónicas, y que devienen en esta destrucción de todo lo que está vivo que estamos protagonizando: la antesala del colapso.
Por eso este encuentro, para ejercer una deconstrucción de todo lo que implica el evento alimentario. Por un lado, la gula pecado capital y arma de control usado por las marcas. Por otro, lo animal: la domesticación, la carne, la serialización de la vida y la afirmación sistémica de la crueldad. Y, por último, un acercamiento a un evento inminente: el colapso de la naturaleza, que, a no ser que cambiemos el menú será una realidad efectiva.