Los Caligaris

El próximo 2 de septiembre, Los Caligaris estrenarán en el Konex su nuevo espectáculo, bautizado Espíritu payaso. Que hayan elegido ese nombre tiene algo de redundante, porque la realidad es que Los Caligaris son la encarnación viva del espíritu payaso.

Todo el universo alrededor del grupo cordobés que fusiona cuarteto, ska y rock guarda íntima relación con este personaje colorido: el payaso. Para empezar, el nombre de la banda hace referencia a la leyenda de “Caligari”, un payaso conocido por haberse entregado a la alegría, a tal punto que murió mientras desarrollaba su rutina, convirtiendo la agonía en una parte de su acto. A partir de esa fuerza, Los Caligaris encararon su carrera con una influencia enorme del género circense: popular, colorido, risueño con rutinas sorprendentes y apuntando a toda la familia. El año pasado, celebraron sus primeros veinte años de vida motorizados por este espíritu alegre. De hecho, el espectáculo se llamaba El show más alegre del mundo, nombre con el que también bautizaron a su segundo DVD en vivo, grabado en el Palacio de los Deportes de México y publicado a principios de este año.

“Nosotros les rendimos tributo a todos los payasos, porque consideramos que ser payaso es uno de los oficios más nobles del mundo”, dice Diego Pampiglione, baterista del grupo y uno de los fundadores junto a su hermano Martín, que oficia de voz principal. “Por eso, Espíritu payaso acentúa el perfil que venimos dando desde siempre, con un repaso de estos veintiún años, que no es poco tiempo, pero tampoco es mucho. Todavía consideramos que es una banda nueva que tiene muchísimo por mostrarle a la gente”, agrega.

Espíritu payaso está planteado como una experiencia que comienza con una serie de actividades antes del concierto. “Vamos a tocar temprano, para toda la familia, y antes del show, va a haber una ‘experiencia caligari’, con actividades que no solo tienen que ver con lo musical”, adelanta Diego, y detalla: “Vamos a adornar el Konex como si fuera una kermés y va a haber juegos típicos, como el de embocar la argolla, como si fuera la antesala del circo. Además, a la gente que llegue temprano, le vamos a hacer un aplique de payaso”.

Con esa alegría única que transmiten sus shows, el grupo cordobés se convirtió en un fenómeno en toda América Latina, especialmente, en México. “Somos una banda a la que nos gusta mixturar el rock con el cuarteto y de a poco ocupamos un lugar como la banda de rock alegre, que nos ha dado la posibilidad de posicionarnos en otros países de Latinoamérica. Gran parte de eso se lo debemos al público mexicano, que fue bisagra y trampolín para llegar a otros públicos de Latinoamérica, incluso, a Estados Unidos. Nosotros ya vamos con el pie derecho: Latinoamérica tiene mucho respeto hacia la cultura argentina”, comenta Diego. Y aunque tocaron en varias partes del mundo, no duda en destacar la particularidad del público porteño: “Es un público sumamente efusivo, del pogo y del rock. Si le gusta, va a hacértelo notar, y así, nos sentimos muy a gusto”, asegura.

El espíritu payaso de Los Caligaris tiene su raíz en la infancia de Martín y Diego. Ambos vivieron en el Circo de los Hermanos Muñoz durante una buena parte de su niñez y la constelación familiar íntegra se movió alrededor de la alegría: bisabuelo, abuelo, papá, todos fueron payasos. En la actualidad, tienen un primo que es payaso en un circo en Vietnam y otro que lo es en uno de Barcelona.

“Vivir en un circo es muy particular, es muy distinto de vivir en una casa y tener siempre los mismos vecinos. Una de las particularidades más lindas es el hecho de ser nómade, de ir de un lugar a otro, de conocer distintos paisajes y públicos. Es una vida feliz, la gente de circo es gente que tiene la suerte de vivir de lo que ama y tiene una vida mágica”, considera.

Por eso, para Los Caligaris, la forma de continuar celebrando esa vida y homenajear a sus raíces es a través de la música: “Estamos montados en este circo que es Los Caligaris, que no tiene carpa ni animales pero que trata de dejar un mensaje de alegría y optimismo”, expresa Diego y concluye: “Los Caligaris hace una música que tiene un estilo optimista y trata de robar una sonrisa, como todos los payasos del circo”.